ACTUALIDAD


AUSENCIA DE POLÍTICA PESQUERA

A raíz de nuevas notas periodísticas relativas a reparto de motores para pesca ribereña por parte del gobierno del estado, queda claro que con tales acciones se pretende sustituir a lo que debería ser una política integral efectiva para el desarrollo del sector pesquero.
Y nada se dice acerca del impacto real que sobre la economía de los pescadores y la ecología de bahías y esteros tiene la proliferación de pequeñas embarcaciones y motores con limitada potencia, capacidad máxima de dos toneladas y, consecuentemente, de escasa productividad.
Lo que realmente se requiere, pensamos algunos, es un programa de amplio espectro que libere al pescador de la medianía y la sobrevivencia elemental y lo apoye verdaderamente, desde la capacitación, el crédito, la comercialización y el establecimiento de condiciones para el desarrollo de las especies, hasta la industrialización, para dar valor agregado al trabajo y las capturas en los mares sudcalifornianos.
La entrega de esos elementos de trabajo es bien recibida por los beneficiarios, desde luego, pero resultan insuficientes para lo que en verdad requiere el hombre del mar, con el añadido de que no hay seguimiento ni evaluación periódica de sus efectos, por lo cual es bien sabido que una parte de los motores es puesta a la venta y sus costos pasan a fondos perdidos; se desconoce en qué porcentaje, pues no hay verificación de resultados.
Baja California Sur cuenta con 2705 km de litorales, que representan el 23.33 % (casi la cuarta parte) del total nacional, amén de la gran veriedad de especies de sus aguas, lo cual debiera ser bastante para pensar en el potencial pesquero de esta entidad y la conveniencia de incrementarlo con empeños de gran perspectiva.
A cambio de eso, el gobierno estatal distribuye motores fuera de borda, con la falsa idea de que “modernizan al sector pesquero”.
El deber gubernamental en este ramo es buscar el beneficio a largo plazo del pescador, con visión de estado, más allá de simples ejercicios mediáticos que al final resultan intrascendentes, y donde el esfuerzo de los trabajadores del mar queda frustrado, sin mayores beneficios para ellos, sus familias y la economía de Baja California Sur.
En todo caso, los recursos que aplica el ejecutivo de la entidad en dichas tareas cortoplacistas, provienen en buena medida del presupuesto federal, lo cual constituye otra forma de saludar con sombrero ajeno, práctica proverbial de las dos recientes administraciones sexenales del estado.

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HISTORIA


EFEMERIDES

FEBRERO

4 (1925). Nació en La Paz Alberto Andrés Alvarado Arámburo, quien sería eficiente servidor público, apasionado político y visionario gobernante de Baja California Sur. Murió el 14 de febrero de 1996.

5 (1944). Fue inaugurada por el gobernador Francisco J. Múgica la escuela Normal Urbana de La Paz, a la que posteriormente se impuso el nombre de uno de sus fundadores, el maestro Domingo Carballo Félix, y declarada “Benemérita” en 1986 por el gobernador Alberto A. Alvarado Arámburo.

6 (1697). José Sarmiento y Valladares, virrey de la Nueva España, entregó a los Jesuitas Juan María de Salvatierra y Eusebio Francisco Kino la licencia para iniciar la evangelización de las Californias.

LIBRERÍA



Mis recuerdos. Sinarquismo y colonia María Auxiliadora, por Salvador Abascal, Ed. Tradición, 1980, México, 790 págs,.

Con prólogo de Salvador Borrego, esta crónica abarca de 1935 a 1944, desde las “Primeras andanzas” del autor, pasando por su militancia en el sinarquismo, las gestiones y el reclutamiento para la empresa en Baja California Sur (BCS), la fundación, las vicisitudes y prosperidad de la colonia María Auxiliadora, hasta el abandono del proyecto y su rompimiento con la Unión Nacional Sinarquista (UNS).
La idea de la colonización en BCS fue lanzada por Abascal al presidente Manuel Ávila Camacho en un telegrama donde le expresó, en la última parte: “Propóngole plan de colonización inmediata obligándome colonizar breve plazo terrenos actuales desérticos de Baja California, con miles familias sinarquistas que cultivarán la tierra, construirán carreteras y crearán nuevas industrias. Sin que nada de esto signifique gastos para el gobierno federal, excepto los caminos.”
Y explica: “Cuenta el sinarquismo con la mística exaltada y limpia del amor a México y con la generosidad del pueblo entero. Dicha colonización facilitará la instalación de fuertes guarniciones de soldados federales en los lugares que la defensa del país lo requiera.”
Eran tiempos de guerra y existía el riesgo de que las potencias del Eje (Japón, Alemania e Italia) pretendieran avanzar en suelo americano a través de la península californiana, particularmente de bahía Magdalena.
El proyecto subsecuente fue recibido en la presidencia con la promesa de apoyarlo, lo cual fue cumplido a través del gobernador de BCS, el general Francisco J. Múgica.
Caso curioso el del encuentro y colaboración, en tales circunstancias, entre el revolucionario de izquierda incuestionable y el dirigente de acendradas convicciones religiosas. Esto sólo podía darse en un ámbito difícil como el de Baja California Sur, ajeno para ambos, pero en el que se encontraron y entendieron.
Termina Abascal con este párrafo: “Como quiera que sea, se ha poblado el desierto más agrio, desolado y apartado de México; pero gracias a que [la colonia] María Auxiliadora puso la muestra de que se le podía domar y hacer florecer.”
De Isidro Rivera es este fragmento de su corrido “Madre, me voy a California”:
“Estas tus tierras, hoy tristes y desiertas,
convertiremos en un hermoso edén;
por nuestro esfuerzo serás, ¡oh, California!,
de nuestra patria riquísimo vergel.”
La historia sudcaliforniana quedó así enriquecida, sin duda, con el empeño de las familias de mexicanos que, encabezadas por un proyecto sinceramente providencialista, hizo de esta tierra, como tantas veces, laboratorio idóneo para la procuración de una utopía.

ACTUALIDAD



CHATARRA ESCOLAR

Son muchos, demostrados y evidentes los perjuicios que acarrea el consumo consuetudinario de los productos de bajísimo valor nutritivo que se expenden en las tienditas, “cooperativas” o restaurantes de las instituciones de enseñanza, desde la escuela primaria hasta la universidad: frituras y líquidos mal llamados “refrescos” rebosantes de calorías, carbohidratos, sodio, azúcar y grasas saturadas, que en exceso resultan de severo peligro para los organismos de niños, adolescentes y jóvenes.
Desde hace algún tiempo las dependencias sanitarias de nuestro país comenzaron a registrar en los muchachos índices preocupantes de obesidad, hipertensión y diabetes, por citar sólo tres padecimientos notables, debidos a la ingestión de tales mercancías.
La legislatura estatal anterior (2005-2008), y por iniciativa del Dr. Francisco Martínez Mora, presidente de la comisión de Asuntos Educativos y de la Juventud del propio congreso en ese periodo, decretó la disposición que prohibía la entrada, venta y consumo de alimentos chatarra en los planteles de educación básica, al mismo tiempo que estableció la necesaria coordinación en tal sentido entre las secretarías de Educación Pública y de Salud, así como los ayuntamientos, pero al parecer la instrucción parlamentaria tuvo efecto sólo parcial, pues en la mayor parte de los centros educativos se sigue omitiendo su cumplimiento.
Porque la ley ahí está, pero se carece de la reglamentación para que las autoridades sanitarias, educativas y municipales estén en condiciones legales de ejercer acciones precisas en tal sentido.
El doctor Francisco Cardoza Macías, secretario de Salud de BCS, a petición expresa tuvo la gentileza de ponerme en comunicación con la Dra. Araceli García Rivas, subdirectora de Medicina Preventiva de esa dependencia, quien amablemente me proporcionó una vasta información al respecto, que amplía las variables del problema y abre otras muchas líneas de estudio que tienen que ver con orientación alimentaria, protección de riesgos sanitarios, ejercicio físico, participación responsable y decidida de los padres de familia, de los maestros y, obviamente, de los propios estudiantes, etc.
De los datos surge una realidad terrible: Baja California Sur rebasa el índice nacional en sobrepeso y obesidad en todos los grupos de edad, y es la diabetes (en gran medida derivada de estas circunstancias) la primera causa de mortalidad en el estado.
A ello contribuye, por supuesto, el sedentarismo que en parte causa la facilidad que aquí se tiene para que todo el mundo adquiera un automóvil, la exagerada afición por el televisor y la computadora, la falta de patios para que los miembros de la familia se ejerciten en esos hacinamientos llamados casas “de interés social”, la falta de parques (pues los directivos municipales venden las zonas de los fraccionamientos denominadas de “donación”, destinadas por ley al establecimiento de áreas de recreación comunitaria), atención a los que existen y todo lo demás aledaño a la negligencia, el importanadismo y la corrupción.
Pero volvamos a las escuelas y los expendios de alimentos chatarra (“yonk food” en inglés), que técnicamente no reciben esta denominación sino la de “alimentos poco saludables”, porque también es preciso delimitar el contenido nutricional de un producto con su carga de perversidad.
Se comprende que quienes venden las dichosas “botanas” y “refrescos” no tengan conciencia del daño que están causando con estos agresores a la salud que, a precios carísimos por otra parte, ponen en el aparato digestivo de las nuevas generaciones. Es su negocio o empleo y no están obligados por ello a poseer ninguna especialidad en nutrición, aunque sí a la capacitación aunque sea mínima.
Por su lado, las grandes empresas que elaboran estas cosas presionan para que las dejen llevarlas a sus preciosos consumidores cautivos dentro del perímetro escolar. Son industrias generadoras de empleos, sin duda, desde la fábrica hasta la tiendita, pero a qué precio...
Y la publicidad en los medios se encarga de convencer a todo el mundo de las supuestas virtudes de sus aguas envasadas y artificios comestibles que los alumnos terminan comiendo y bebiendo de forma compulsiva, tanto que aun fuera del centro de estudio continúan adquiriéndolos en la tienda del barrio, repleta de esas mercaderías.
Algunas mamás de chicos de primaria dan a éstos una “lonchera” preparada con fruta fresca, algún emparedado y un jugo natural para que los tomen en el receso. Otras más se aproximan al cerco escolar y dan a sus hijos alimentos frescos elaborados en casa.
Lamentablemente, la mayoría de los padres se limitan a proporcionarles dinero para que adquieran los productos que ofrecen en el expendio interior los comerciantes, los cuales conceden a la escuela comisiones y materiales en especie; en algunos casos, los directores obtienen ahí el refrigerio gratuito, a cambio de permitir el deterioro de la salud de los pequeños.
Habría que recomendar, entonces, llevar a efecto un proceso reeducativo en varios frentes, que quien corresponda prohíba rotundamente o al menos limite la oferta de tales perniciosos alimentos, y que, en cambio sea autorizada la de aquellos que, a precios razonables, ayuden en verdad al desarrollo de los niños, adolescentes y jóvenes sudcalifornianos.
O sea que no se trata de lesionar las ganancias de los vendedores sino de que modifiquen algunos modelos del negocio en bien de todos.

Correo e.: em_coronado@yahoo.com



Nota: Para más información relativa se sugiere visitar los siguientes sitios:
http://www.elpoderdelconsumidor.org/meten-en-cintura-a-cadenas-de-comida-r-pida-en-gb.html
http://www.elpoderdelconsumidor.org/la-sep-recula-ante-la-comida-chatarra.html
http://www.elpoderdelconsumidor.org/videos--nutrici-n-y-salud.html
http://www.elpoderdelconsumidor.org/escuelas-p-blicas-f-bricas-de-gorditos.html
http://quadratin.com.mx/www1/noticia.php?id=60880
http://www.youtube.com/watch?v=FNpXSwF2GJI

HISTORIA



EFEMÉRIDES

ENERO

26 (1987). Fue inaugurada por el presidente Miguel de la Madrid la Unidad Cultural “Jesús Castro Agúndez”, en La Paz. Constituyó un empeño que ocupó todo el sexenio del gobernador Alberto Alvarado Arámburo, quien culminó así su proyecto de apoyo al desarrollo cultural de los sudcalifornianos.

28. (1915). Nombrado por la Convención de Aguascalientes, el Gral. Félix Ortega Aguilar llegó a Santa Rosalía para hacerse cargo del gobierno del distrito Sur, puesto en el que permaneció hasta el 29 de mayo del siguiente año en que fue depuesto por un levantamiento militar que lo obligó a huir a los Estados Unidos.

LIBRERÍA



Bahía Magdalena, por Reynaldo Pérez Gallardo*, Biblioteca Popular, Ensenada, B.C., 1943.

Trata de las operaciones de la RegiónMilitar del Pacífico que, jefaturada por el general Lázaro Cárdenas y con base en Ensenada tuvo la misión de aprestar la defensa de las costas del oceano Pacífico mexicano contra la probable agresión de las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón), durante la II Guerra Mundial.
En el volumen se hace la crónica desde que se establece el cuartel general en aquella Ensenada de Todos los Santos, a fines de 1942, hasta la disposición de la defensa y los procedimientos subsecuentes.
Explica el autor que Cárdenas “supo advertir a tiempo que era más inminente la ocupación de esta parte del suelo mexicano por tropas de nuestros buenos vecinos, que la procedente de allende el mar Pacífico.” Lo que al final resultó profético, como se comprueba en el relato.
El libro consta de 5 capítulos en 113 interesantes páginas, al término de las cuales se concluye con una pregunta: “¿Hasta cuándo dejará de ser manzana apetitosa para los hijos del Tío Samuel este jirón de nuestra patria?”
A estas alturas parece ser que este jirón de nuestra patria, aunque no deja de ser manzana apetitosa para los norteamericanos, ha pasado a ser manjar pretendido de algunos voraces connacionales nuestros que por su condición de autoridades debieran ser los primeros en defenderlo.

ACTUALIDAD


LA EFICACIA INADVERTIDA

En las sesiones plenarias de la Comisión de las Californias (integrada por representantes oficiales de las dos Californias mexicanas y la estadounidense) colaboraba un traductor simultáneo de ambas lenguas, tan eficiente que llegaba un momento en que los asistentes olvidábamos los audífonos colocados en la cabeza, con la ilusión de que por cuenta nuestra entendíamos cabalmente todo lo que se decía en el otro idioma.
El traductor se colocaba con sencillez junto a uno de los muros laterales del salón de reuniones y ahí, desde su micrófono y transmisor inalámbrico, sin hacerse notar, realizaba su importante y, para la mayoría, imprescindible trabajo. Así se lo hicimos saber en alguna ocasión al tiempo que lo felicitábamos por su labor discreta que generalmente terminaba por pasarnos inadvertida.
Con sabiduría que da el oficio nos explicó que en eso consideraba él que consistía la eficacia de su cometido: hacerlo tan bien que no se sintieran su presencia ni su tarea.
Igual cosa ocurre con elementos tan importantes de nuestro organismo como el corazón, que cuando funciona bien dejamos de sentirlo y entonces hasta nos olvidamos de víscera tan preciada de nuestra existencia. Pero sabemos que ahí se encuentra, más efectivo mientras más modesto, funcionando para que sigamos vivos.
Lo anterior viene a cuento por el excesivo empeño que ponen los funcionarios públicos en dar a conocer lo que hacen y lo que ello cuesta, como si no se les pagara bastante bien por su quehacer y como si el gasto o la inversión salieran de su propio bolsillo.
Ese afán de aparecer todos los días en los medios de información llega a ser enfermizo y termina por molestar, pues a base de divulgación insistente sobre la obra de gobierno se pretende hacer creer a la gente que se está administrando adecuadamente la cosa pública.
Nada más alejado de la verdad: quien realmente cumple sus funciones no requiere hacer aspavientos ni ensalzarse (con gloria vana); la buena obra de gobierno se ve, se percibe, se siente, sin necesidad de que la fotografía del gobernante aparezca varias veces en el periódico y la revista, y de que su nombre se repita hasta el cansancio en los órganos oficiales de radio y televisión.
Hay padres inteligentes que enseñan a sus hijos ver la televisión con sentido crítico, de manera que aprenden a captar los anuncios como lo que son: simples elogios a productos que cada comerciante quiere vender.
El sector pensante de la sociedad sabe que toda promoción mediática a la obra de gobierno conlleva finalidad propagandística y tiene un precio (con cargo al erario, que es decir a nuestras contribuciones), como cualquier artículo comercial, y que las proclamas sobre las supuestas virtudes de tal o cual realización están preparadas desde el propio poder, o sea que constituyen autoelogios que el individuo responsable debe escuchar y leer siempre con la dosis conveniente de incredulidad y desconfianza.

Correo e.: em_coronado@yahoo.com

HISTORIA


EFEMÉRIDES

ENERO

20 (1540). Francisco de Ulloa descubrió y tomó posesión de la isla de Cedros, cuyo nombre indígena era Amalguá (isla neblinosa).

“Domingo [18], lunes [19] y martes que estuvimos a los 20 de dicho mes de enero navegamos con vientos débiles y contrarios y al fin llegamos hasta el cabo de la punta de la isla (llamada isla de los Cedros) porque en la cima de las montañas de ella hay una selva de estos cedros muy altos, como es la naturaleza de ellos...”

20 (1728). Los jesuitas Juan Bautista Luyando y Sebastián de Sistiaga fundaron la misión de San Ignacio Kadakaamán.

Juan Bautista Luyando nació el 24 de junio de 1700 en la ciudad de México; a los 16 años de edad ingresó al noviciado y luego hizo estudios de filosofía en el colegio jesuítico de San Ildefonso de Puebla. Una vez ordenado sacerdote fue enviado a misionar en California donde quedó adscrito como ministro en San Ignacio Kadda-Kaamán, cuya misión fundó, de su patrimonio personal, junto con el padre Sistiaga, y en la que permaneció durante seis años. Más tarde pasó al ministerio en la Casa de la Profesa de México y posteriormente fue rector del seminario de San Jerónimo de Puebla. Rector y prefecto de Salud en el colecio de Celaya, y con los mismos cargos después en el colegio de San Luis Potosí. Llegó a ser operario del colegio del Espíritu Santo de Puebla, y murió el 25 de junio de 1755 en el colegio Máximo de México.

Sebastián de Sistiaga era natural de Teposcolula, Oaxaca, donde nació en 1685. De 17 años de edad ingresó al noviciado jesuítico, y a los 27 fue ordenado sacerdote en Puebla. Enviado a California recibió adscripción a Santa Rosalía de Mulegé; recorrió la costa peninsular en busca de buenos puertos; fundó con el padre Luyando la misión de San Ignacio. Fue visitador de las misiones californianas. Pasó a la casa Profesa de México, donde fue prefecto de una congregación; enseguida al colegio del Espíritu Santo de Puebla, donde falleció el 22 de junio de 1756.

23 (1836). Nació en Cabo San Lucas Ildefonso Cipriano Green Ceseña, protagonista en las luchas liberales y de la Revolución Mexicana que se escenificaron en Sudcalifornia. Murió el 27 de marzo de 1932.

LIBRERÍA


El Estado de Baja California Sur, Grupo Azabache, México, 1994, 155 págs.

Es éste uno de los volúmenes mejor editados de la extensa bibliografía de la California mexicana, en cuanto a calidad fotográfica, amenidad de la información y esmero puesto en las tareas de imprenta.
Coordinó los trabajos Armando Trasviña Taylor, y participaron con textos Raúl Antonio Cota, Enrique Hambleton, Juan Melgar, Leonardo Reyes Silva y este cronista. Las fotografías son de Guillermo Aldana y el mismo Hambleton.
Sus páginas están profusamente ilustradas en color, con un mapa; la tirada fue de tres mil ejemplares.
La obra tiene un definido propósito de promoción turística. Está dividida en los capítulos titulados Acercamiento histórico, Espinas en el paraíso, La paz de La Paz, A Los Cabos por pueblos antiguos, Territorio insular, De llanos, bahías y oasis; Misiones en el camino real, Emporios pesqueros del Pacífico, y Sierras: santuarios de arte y biodiversidad.
Este libro, que con altos méritos quedó así incorporado al patrimonio cultural de Baja California Sur, ha tenido subsecuentes ediciones, por lo cual puede ser adquirido todavía.

ACTUALIDAD


LOS MUNICIPIOS SUDCALIFORNIANOS

La edición del Diario oficial de la federación mexicana del sábado 20 de febrero de 1971 publicó la última Ley Orgánica del Territorio de la Baja California Sur.
En ésta se argumentaba la pertinencia de restablecer el régimen de municipio libre en la entidad, ya que es “sin disputa una de las grandes conquistas de la Revolución, como que es la base del gobierno libre, conquista que no sólo dará libertad política a la vida municipal, sino que también le dará independencia económica, supuesto que tendrá fondos y recursos propios para la atención de todas sus necesidades.”
Y agregó que, al ser el municipio “base de la organización política y administrativa del país, su restablecimiento en el Territorio de la Baja California Sur... da el fundamento necesario para que sus habitantes participen más activamente en su vida política, cuando la entidad acelera el ritmo de su desarrollo económico.”
Y así quedó dispuesta la transformación de las siete delegaciones de gobierno en tres municipios, “tomando en consideración razones de orden económico y demográfico...”
El gobierno del presidente Luis Echeverría ponía del tal manera una base imprescindible para la inminente conversión del Territorio federal en Estado de la federación, sobre el criterio primordial de la autosuficiencia económica de los municipios y la correspondiente solvencia financiera de sus ayuntamientos.
Éstos comenzaron a organizarse a partir del 1 de enero de 1972 y a operar en las condiciones óptimas que les permitían el equipo y los inmuebles heredados de las antiguas delegaciones (que no eran pocos), una nómina razonable de empleados de base y de confianza, así como el apoyo comprometido en recursos dinerarios de los gobiernos federal y local.
Estábamos lejos, por entonces, de enfrentar la situación presente de caos provocado por la ineficiencia administrativa, las desviaciones nunca explicadas de fondos públicos, la ofensiva proliferación de expendios de bebidas alcohólicas, las invasiones de terrenos con permiso y protección oficiales, los asentamientos humanos consentidos en zonas de riesgo, la insensibilidad política tanto como los enconos y divisiones que tienen indudable origen en actitudes partidistas y electoreras de autoridades que debieran mantener imparcialidad democrática permanente.
Aun así, desde el ejecutivo estatal ha sido anunciada la intención de promover el establecimiento de otro municipio, en la zona más norteña del estado, sin que de entrada se tenga un estudio de factibilidad para el sostenimiento de la nueva plantilla burocrática, y acerca del probable impacto socioeconómico en la región.
Puede uno preguntarse dónde está, para esa finalidad, la infraestructura en que tendrá lugar el desarrollo de la planta productiva creadora de los nuevos empleos que se requieren para la autosuficiencia de la vida municipal; dónde la consulta a la población mulegina sobre el asunto, dónde las razones válidas y suficientes para el nuevo fraccionamiento del territorio estatal.
A todos los sudcalifornianos debe ocuparnos el interés y la reflexión un tema tan serio, como debiera serlo para quienes se hallan por ahora en la cima de las decisiones políticas.
Lejos de negar la posibilidad fundacional del sexto municipio, podemos creer que ello debe ocurrir una vez que nuestros conciudadanos del norte estatal posean bases tangibles, sólidas y crecientes para su próspera existencia autónoma. Porque está fuera de duda que son capaces de crearlas por sí y con el apoyo del resto de sus paisanos.
Sin embargo, la demagogia y el popularismo no sirven para un proyecto tan importante.
Se debe cambiar para mejorar, no para seguir igual o peor, pero este axioma insoslayable del crecimiento social parece perder importancia ante la expectativa –no necesariamente confiable- de distraer la atención pública, lograr simpatía popular, captar aceptación política y obtener ganancia electoral.
Pese a todo, confiemos en que la razón prevalecerá y que la responsabilidad de los actores pensantes del proceso en cuestión finalmente impedirá llevar a cabo tal propósito, justo sin duda, pero sin apresuramientos indebidos ni ligerezas fatales.
Así sea.

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HISTORIA


EFEMÉRIDES

ENERO

11 (1898). Nació en Santa Anita, del hoy municipio de Los Cabos, el historiador Pablo L. Martínez, quien sería precursor de los estudios históricos de las Californias.

15 (1975). Fue promulgada la Constitución Política del Estado de Baja California Sur, uno de los documentos de mayor significación en la historia de esta entidad federativa.
Expedida por el Constituyente el 9 de enero de 1975, fue promulgada por el gobernador provisional Félix Agramont Cota seis días más tarde, cuando también se distribuyeron al público los primeros ejemplares de la primera edición con un tiraje de diez mil, realizada en facsímil.

LIBRERÍA


Constitución política del Estado de Baja California Sur, H. Congreso Constituyente, Gobierno del Estado, La Paz, BCS, 93 págs., La Paz, 1975.

Abarca 167 artículos inscritos en once títulos y 16 artículos transitorios, orientada firmemente a las modernas corrientes políticas, económicas y sociales del constitucionalismo occidental.
Por ejemplos: señala como función del Estado la promoción del desarrollo económico y la regulación del proceso demográfico; en el renglón de garantías sociales, organización del patrimonio familiar sobre la base de su inalienabilidad y exención de embargo y gravamen; la protección del hogar, la maternidad y la infancia, así como el derecho correlativo a la calidad de padres, la determinación libre, informada y responsable acerca del número y espaciamiento de los hijos, y su educación como deber supremo ante la sociedad.
Expresa que todo hombre y mujer son sujetos de iguales derechos y obligaciones ante la ley; establece la obligatoriedad y la gratuidad de la educación media básica; dispone que toda persona reducida a prisión tiene derecho a la readaptación social sobre la base del trabajo, la capacitación para el mismo, la educación y la reestructuración de su personalidad.
Integra al Congreso del Estado con diputados de partido; indica que todos los contratos y concesiones que el gobierno estatal y los ayuntamientos tengan que celebrar para ejecución de obras públicas y servicios, serán adjudicados en subasta; ordena la elaboración de planos reguladores por las administraciones municipales y estatal, etc.
Esta carta, que norma la convivencia entre los sudcalifornianos, continúa siendo en varios sentidos, treinta y cinco años después, un código fundamental en la vanguardia del constitucionalismo mexicano.

ACTUALIDAD


EL AYUNTAMIENTO PACEÑO Y LAS ISLAS DEL GOLFO DE CALIFORNIA

En oficio del 31 de enero de 2000, el ayuntamiento de La Paz se dirigió a la directora de la Reserva Islas del Golfo de California, oficina regional en Baja California Sur [BCS], y luego de algunas referencias antecedentes, en su parte medular hacía el siguiente recuento de naturaleza legislativa:
* De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 3o. del decreto expedido el 5 de julio de 1891, las islas del golfo de California quedaron bajo la jurisdicción del Distrito Sur.
* El decreto del 20 de enero de 1929, en la Ley Orgánica del Distrito y Territorios Federales, el artículo 109 establece las extensiones y límites del Territorio, y en el 112 el ámbito de jurisdicción del Distrito Sur.
* Por decreto del 7 de febrero de 1931 se modificó la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos [EUM], estableciéndose en el artículo 45 que los estados y territorios de la federación conservan la extensión y límites que hasta hoy han tenido.
* El decreto del 4* de febrero de 1971 estableció la Ley Orgánica del Territorio de la BCS, misma que en su artículo 1o. señala que: el territorio de BCS conservará la extensión y límites señalados por la Constitución Política de los EUM y precisados por esta ley. Y fue más allá al aclarar en su artículo 2o. que, en relación con el artículo 48 de la Constitución Política de los EUM, quedan comprendidas bajo la jurisdicción del territorio las islas [...], situadas en el golfo de California, y además las islas, islotes y cayos adyacentes localizados entre los paralelos 28º y 22º 39´ norte.
* Mediante el decreto del 8 de octubre de 1974, se modificaron, entre otros artículos, el 45 de la Constitución Política de los EUM, estableciendo que los nuevos estados de la federación [BCS y Quintana Roo] conservarán la extensión y límites que hasta hoy han tenido... Y en el artículo 1o. de transitorios establece que: “El estado de BCS tendrá la extensión territorial y límites que comprenden actualmente el territorio de BCS.”
* Con fundamento en la reforma constitucional anterior se creó la Constitución Política del Estado de BCS, que establece en su artículo 34, fracción II, lo siguiente: quedan comprendidas bajo la jurisdicción del estado las islas que a continuación se mencionan: [...], y además las islas, islotes y cayos adyacentes localizados entre los paralelos 28° y 22º 30 ´ norte.
* Posteriormente [...], el decreto del 17 de diciembre de 1976, la Ley Orgánica Municipal, reglamentaria del título octavo de la Constitución Política del Estado de BCS, que en su artículo 3o. define la división municipal y en cuyos límites quedaron comprendidas las islas, islotes, cayos y arrecifes ubicados dentro de sus respectivas jurisdicciones.

“Con base en lo anterior proponemos el establecimiento de una coordinación respetuosa, dentro de los ámbitos de competencia de cada autoridad, y buscar establecer un plan de manejo que defina claramente los objetivos y prioridades de protección, conservación, productividad y aprovechamiento para cada una de las islas, las de jurisdicción federal y de jurisdicción estatal y municipal, con sustento en los fundamentos invocados en el decreto de 1978, artículo 35 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal [...]”

El documento en mención trataba básicamente, claro está, de temas de interés ecológico y desarrollo sustentable, mas lo esencial de su contenido es que arguye razones de carácter jurisdiccional, que reconocen el derecho de la sociedad sudcaliforniana sobre sus islas, lo cual descalifica hoy la competencia federal para modificar su nomenclatura, como acaba de ocurrir en el acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación del 17 de noviembre anterior, con motivos y fines todavía inexplicados.


* La fecha correcta es del 20 de febrero de 1971.

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HISTORIA




EFEMÉRIDES

ENERO

6 (1977). Murió en La Paz Marcelo Rubio Ruiz, prestigioso catedrático, maestro de varias generaciones de profesores, funcionario público y senador de la República por BCS.

9 (1970). Murió en la ciudad de México el historiador Pablo L. Martínez.
Al término de su educación primaria ingresó a la Academia para Maestros que funcionaba en San José del Cabo, población cercana a Santa Anita, donde había nacido el 3 de enero de 1898. Ejerció el magisterio en su región natal y más tarde dirigió en la capital del Territorio el periódico Sudcalifornia, y en México la revista Baja California. En el mismo Distrito Federal compuso escenificaciones breves y obras didácticas.
Del interés por la historia de su provincia publicó Efemérides californianas (1950), Historia de Baja California (1956), Lecciones de historia de Baja California (1958), El magonismo en Baja California (1958), Sobre el libro “Baja California heroica” (1960) y Guía familiar de la Baja California (1965). Póstumamente fue editada su inconclusa Historia de la Alta California por el profesor Jesús Castro Agúndez.
Sus restos mortales fueron reinhumados en la Rotonda de los Sudcalifornianos Ilustres.

10 (1847). El pueblo de Los Ángeles cayó en poder de los invasores norteamericanos, que así se apoderaron de toda la Alta California.

LIBRERÍA




Guía familiar de Baja California, 1700-1900, por Pablo L.Martínez, Editorial Baja California, México, 1965, 1019 págs.

Cuantioso cúmulo de referencias útiles para buen número de habitantes de la península, y notable contribución a los estudios demográficos de esta parte de México es la presente obra, si bien no se trata de una recopilación exhaustiva de todos los materiales que existen en la California mexicana relativos a nacimientos, matrimonios y defunciones en el periodo que se trata de abarcar, ni la transcripción completa de los que tuvo a su alcance el investigador, pues, como él mismo lo dice en la introducción: “he procurado seleccionar todas las familias que me son conocidas, o sea la mayoría de las pobladoras de Baja California; y de las no muy conocidas he tomado unas y otras no...”
Los aproximadamente doce mil asentamientos que se proporcionan pertenecen, en su gran mayoría, al siglo XIX, tomados en los archivos eclesiásticos de Mulegé, San Ignacio, San Borjas, La Purísima, San Antonio, San José del Cabo, La Paz, Todos Santos, Comondú, Loreto y Santiago. Tuvo acceso a los archivos civiles de Mulegé, San José del Cabo, La Paz, Comondú, Ensenada y Santa Rosalía.
De interés particular son los datos que se ofrecen en la introducción: El por qué de este libro, Fenómenos sociológicos sui generis en Baja California, Las primeras familias criollas, Las familias del segundo cuarto del siglo XVIII, Familias militares de la segunda mitad del siglo XVIII, Importancia de Santa Ana en el poblamiento de Baja California, Otras familias de principios de la 19ª centuria, Contribución de sangre no española a la composición familiar de Baja California, Raíces familiares de Baja California Norte, y Advertencias finales.
Al final se hallan los textos de entrevistas a miembros de familias de antiguo arraigo en la península, así como un índice alfabético de apellidos.
Por gestiones del Lic. Ricardo García Soto, a la sazón delegado del Instituto Nacional de Migración en BCS, este organismo efectuó una edición facsimilar en 2002.