Huapango: José Pablo Moncayo (1912-1958). Orquesta Sinfónica Nacional de México


2012: XL aniversario de la reinstauración del municipio en BCS,
año del tránsito de Venus por el disco solar y del centenario del 
natalicio del músico mexicano José Pablo Moncayo García.

ACTUALIDAD


REVOCACIÓN DE MANDATO

La revocación de mandato o plebiscito revocatorio es el proceso por el cual los ciudadanos tienen facultad constitucional, mediante sufragio, de interrumpir el ejercicio de un gobernante o legislador cuando los electores han considerado que alguno de éstos ha dejado de cumplir sus obligaciones esenciales, violado los derechos humanos, caído en actos de corrupción y, en general, perdido legitimidad.
   Este procedimiento, que parecería lógico y sencillo en términos de la democracia directa (como el referéndum, el plebiscito y la iniciativa legislativa popular), se vuelve impracticable pues el gobernante o parlamentario tiene siempre a su alcance una serie importante de recovecos legales que obstaculizan el cumplimiento de esa especie de retractación de la confianza depositada en ellos.
   Por eso es fácil que los demagogos prometan, como otro elemento para atraerse votos, que en determinadas etapas de su administración promoverán la opinión popular para efectos de revocación o no de su mandato.
   Esto lo ofreció Hugo Chávez y ya tiene trece años en el poder, lo cual cada vez se asemeja más a una dictadura; la única manera de atajarlo será el triunfo de Henrique Capriles el 7 de octubre próximo. Pero de su promesa de convocar a un plebiscito para ver si los venezolanos revocan su mandato, nada, aunque en la constitución de ese país se halla establecida dicha facultad ciudadana.
   Calificado experto en esta materia es seguramente Joseph F. Zimmerman, autor de The Recall. Tribunal of the People (USA, 1997), en cuyo libro puede uno enterarse de que es en los Estados Unidos de [Norte] América donde tiene raíces más profundas esa institución, y de su complejidad teórica y práctica. 
   En México, Chihuahua es la única entidad que reconoce en su carta estatal, desde 1997, la viabilidad de la revocación del mandato.
   En los entusiasmos de su campaña electoral,  un ignaro candidato a gobernador de Baja California Sur ofreció la instauración de ese dispositivo en la Constitución local, pero ya en el usufructo del poder se cuidó bien de promover iniciativa alguna al respecto.
   Conviene advertir que el mandato revocatorio ninguna relación tiene con el golpe de estado (como el que dieron a Zelaya en Honduras), la sublevación popular (Egipto, Libia, Siria), la presión a la renuncia (como Nixon a raíz del Watergate) o la destitución mediante juicio político (como acaba de ocurrir al presidente Lugo en Paraguay por parte del senado: 39 a 4), ya que, en el primero, nada sino el sufragio ciudadano (que es el que elige a sus gobernantes y legisladores) puede cancelar el desempeño de estos funcionarios.
   Candidato hubo por ahí que anduvo ofreciendo esta engañifa a sus potenciales electores, aunque a últimas fechas dejó de tocar el tema; probablemente sus asesores le aconsejaron olvidar el embeleco. 
   Desconfiemos entonces de los candidatos que prometen que al término de una etapa breve de su estadía en el ejercicio del mando se someterán a la consulta para que sus electores decidan si les permiten continuar o no, ya que invariablemente encuentran argucias para evitar la consulta o manipular sus resultados.
   Y finalmente hay que soportarlos hasta el término de su periodo.
   (Imagen: mexico.cnn.com) 

HISTORIA


EFEMÉRIDES

JULIO

01 (1769). Procedente de Loreto llegó a la Alta California la expedición por tierra que fundó su primera misión en San Diego.

01 (1891). Entró en vigor el decreto del presidente Díaz por el cual quedó establecido el paralelo 28 grados de latitud norte como línea divisoria entre los distritos Norte y Sur de la península de Baja California.

01 (1860). Se hizo cargo del gobierno peninsular Manuel Clemente Rojo, promotor de importante labor educativa en esta península y autor de Apuntes históricos de la Baja California.

02 (1542). El navegante Juan Rodríguez Cabrillo tuvo a la vista la costa californiana; arribó al puerto de San José del Cabo donde se abasteció de agua para proseguir su ruta de exploración por el Pacífico peninsular.

07 (1822). Fue jurada por tercera vez en Loreto la Independencia de México, en acto organizado y realizado por fray Agustín Fernández de San Vicente, representante oficial del gobierno iturbidista.
   “Se dio principio a la función del juramento solemne con un repique de campanas, salva de la tropa y artillería con las demás demostraciones de júbilo que permite el país... Para mayor ornato se iluminaron en la noche de este día las casas de todo el vecindario, dando fin la función con un baile que celebró en su casa el señor alcalde...”

PERSONAJES


MANUEL CLEMENTE ROJO

Exiliado de su Perú natal llegó a México en 1849, a la edad de 26 años, con estudios de Derecho y formado en el pensamiento liberal de su tiempo y de su patria. Un poco después vivió en Los Ángeles, Alta California, donde colaboró en un despacho jurídico y en el periódico Star.
   Hacia 1854 se encontraba en la ciudad de México participando en el derrocamiento de Antonio López de Santa Ana. Al año siguiente, el presidente Ignacio Comonfort le dio nombramiento de juez constitucional de La Paz. Luego fue juez de segunda instancia en Todos Santos.
   En este periodo comenzó para Rojo un intenso interés por el pasado reciente de su tierra adoptiva; escribió y entrevistó a varias personas significadas en acontecimientos relevantes de la sociedad sudcaliforniana, a las que solicitó hacerle relato de hechos que hubiesen atestiguado. El jurista limeño fue así continuador de la afanosa tarea de redactar las noticias con que lo nutrían sus informantes, oralmente y por escrito.
   Fue enseguida secretario de Gobierno de la jefatura política de Gerónimo Amador, luego jefe político interino, poco después encargado por el nuevo gobernador, Teodoro Riveroll, para elaborar los nuevos programas de impulso educativo de la entidad.
   Adquirió el rancho de la ex misión de San Vicente Ferrer, en el norte peninsular. Recibió más tarde el cargo de juez de primera instancia con cabecera en Santo Tomás, y en 1869 la subprefectura del Partido Norte por disposición del gobernador Bibiano Dávalos.
   En esta responsabilidad desalojó a setenta norteamericanos que habían tomado posesión clandestina de la isla de Guadalupe y se dedicaban a sacrificar las cabras que ahí se habían reproducido abundantemente. Logró establecer el correo marítimo entre San Francisco y La Paz, y fundó la primera escuela primaria en el actual estado de Baja California (norte).
   Luego de algunos otros vaivenes en la vida política peninsular, sus años postreros los dedicó al magisterio en San Diego, Santo Tomás y Ensenada, donde murió a mediados de 1900.