ACTUALIDAD
LAS EVALUACIONES
QUE SIGUEN

Es la evaluación
--a la que se quiere emparentar con el coco de los exámenes-- el quid del asunto, sin explicar que
evaluar es, rotundamente, señalar el valor de algo, estimar, apreciar, calcular su valor, estimar
los conocimientos, aptitudes y rendimiento de alguien --según explica el lexicón
de la Academia de la Lengua-- para diagnosticar, corregir y mejorar.
A estas alturas
estamos enterados vastamente de los argumentos expresados en ambos sentidos,
pero casi a nadie convence la versión simplista que otorga a la reforma el mote
de laboral, y a la evaluación el calificativo de punitiva.
Lo importante es
que se está aplicando el proceso evaluador que va mucho más allá de una serie
de exámenes y que con propósitos aviesos se ha querido demonizar mediante
sofismas que los desinformados ingieren y difunden con facilidad.
Bien por la evaluación
que es parte sustancial de la reforma educativa porque permitirá que sólo
accedan, permanezcan y crezcan laboralmente quienes demuestren que poseen
aptitud, capacidad y disposición para asumir a plenitud la trascendente función
de educar en este país.
Para asegurar
calidad educativa, pues.
Si pretendemos
calidad en nuestro sistema educativo tenemos que aceptar y exigir que accedan a
él los mejores; la sociedad mexicana tiene indisputable derecho a ello porque
es la parte que paga, y el que paga manda.
Mas el asunto debe ir asimismo a todos los
ejercitantes de oficios y profesiones, en particular a quienes pagamos sus
servicios con nuestros impuestos y aportaciones: abogados, arquitectos, cronistas, ingenieros, médicos, servidores públicos y todos los demás, pero también a
quienes cubrimos honorarios personales, con tarifa fija o arancel a discreción:
albañiles, carpinteros, electricistas, mecánicos, meseros, notarios, plomeros, sacerdotes...
O sea que deberá
llegar el momento en que cada uno de ellos, antes de que contratemos sus
servicios nos presenten sus respectivos estados actualizados de evaluación
realizada por instancia confiable, ya que de otra manera nadie nos garantiza el
eficiente desempeño de su trabajo que esperamos y merecemos.
Como es
frecuente que ahora ocurra...
CRÓNICA HUÉSPED
LA CALIFORNIA
Por Miguel del Barco, S. J.
Por cincuenta
leguas, desde el cabo de San Lucas hasta el norte (que es la tierra que en la
California llaman Sur), es terreno menos áspero. No obstante, fuera de algunas
sierras que tiene cerca del golfo, se levanta otra más grande enmedio de la
tierra, que corre de sur a norte, comenzando casi desde el mismo cabo de San
Lucas, por espacio de treinta leguas o más. En las cercanías de la sierra se
hallan aguajes con bastante frecuencia; mas, en retirándose de ella algunas
leguas, como en lo restante del sur hacia La Paz todo es tierra bastante llana,
pero muy seca. Pasado el sur, se sigue la tierra de los guaycuras que, aunque
en la mayor parte menos montuosa, es de lo más estéril de la California toda
[...]
Historia natural y crónica de la Antigua
California, edición y estudio preliminar de Miguel León-Portilla, UNAM, 1a.
pte. de la introducción.
ACTUALIDAD
EL MAGISTERIO DE JUÁREZ
“Creo
que a usted está encomendada la sublime misión de encaminarnos por el sendero
de la moralidad; por eso mi más constante deseo ha sido, es y será verlo
marchar al objeto con paso firme, arrollando todos los obstáculos que se
opongan a la felicidad de México, sin que ninguna consideración humana le haga
vacilar, que su justicia sea tan recta y sincera como los irrevocables juicios
de quien emana.”
El héroe sudcaliforniano, hombre recio, poco
dado al elogio gratuito, y que bien conocía al ilustre zapoteco, enunció en
este breve párrafo las tres prendas sobresalientes de don Benito: moralidad,
firmeza y justicia, que sus contemporáneos y las generaciones actuales le
reconocieron y le apreciamos porque las puso con generosidad al servicio de su
patria.
Es a ese Juárez de carne y espíritu al que
recordamos este 18 de julio, en un
nuevo aniversario de su muerte, en 1872.
Es al Juárez polémico y controversial, no al
Juárez de bronce, desdibujado por los discursos, a quien hay que ofrecer homenaje de reconocimiento.
Y le brindamos testimonio de valoración por
lo que tiene de modelo de conducta para nosotros.
Por eso rechazamos la idea de que la fecha
de su natalicio, y el 18 de julio (de su fallecimiento), sean los únicos días
del año en que evoquemos la figura de Juárez, solamente porque las efemérides
se hallan inscritas en la lista de conmemoraciones obligatorias.
Nos oponemos al criterio de que al hablar de
Benito Juárez estemos hablando de un cadáver.
Pocas figuras de nuestro pasado son ahora tan vigentes como él, como su
magisterio en la elevada cátedra de la conciencia colectiva de este pueblo,
como su lección cotidiana de reciedumbre, de ética civil incorruptible, de
respeto irrenunciable a la ley, de lealtad a la República , de
preservación a la soberanía nacional, de invariable compromiso con los
principios, de fe en México por encima de coyunturas políticas y económicas, de firmeza ante la
adversidad, en fin, de todas las virtudes que aprendimos y sabemos aquilatar en
el Gran Mexicano.
Juárez es modelo de conducta, ejemplo de
actitud decidida frente a las circunstancias, prototipo de cualidades cívicas,
denuedo y constancia en la defensa y acrecentamiento de los más elevados
valores de la nación, pero que reclama, a la vez, que los mexicanos de hoy y
los hijos de los mexicanos de hoy abreven en la rica enseñanza de su vida, en
un magisterio permanente que no debe ser embalsamado para su sola exaltación de
cuerpo presente en celebraciones del calendario cívico.
El magisterio de Juárez es infructuoso
cuando no asumimos como propio el deber ciudadano de alcanzar esas virtudes;
resulta estéril cuando enseñamos a nuestra juventud al Juárez con niveles de
grandeza imposible de imitar, de estatura inalcanzable, de vigor sobrenatural.
Es infecundo cuando, después de las
ceremonias conmemorativas, vuelve cada cual a su tarea sin el ánimo de
cumplirla mejor.
El magisterio de Juárez ha de ser, entonces,
más que memoria, fortaleza y unidad de los mexicanos, aliento a la honradez y
el trabajo de los habitantes de este país, estímulo al empeño individual y
colectivo en favor de los pequeños o grandes objetivos del hombre, la familia y
la sociedad, empuje para aventajar las dificultades que se oponen al desarrollo
con equidad.
Del magisterio de Juárez nos queda la
convocatoria para hallar en el esfuerzo la consecución de lo que queremos,
porque las lamentaciones son sólo para quienes pierden lo que no han sabido
defender.
Nos queda también el exhorto de encontrar en
nuestra propia fuerza la potencia que requerimos para continuar construyendo
esta patria a la altura de nuestros proyectos, con la dimensión de nuestras
mayores aspiraciones, con la inspiración del arquetipo de carne y espíritu en
que se constituyó desde aquel 21 de marzo de 1806, y para siempre, Benito
Juárez, Benemérito de América y Presidente Vitalicio de México.
Imagen: composición
con retratos al óleo de M. Márquez de León (Bernardo Arellano, 2014) y Benito
Juárez (Tiburcio Sánchez de la Barquera, 1858)
CRÓNICA HUÉSPED
Visita
de Reina Isabel II a BCS, perdura en recuerdo de paceños*

La Paz, Baja California Sur.- Era un día cálido en 1983, con el cielo despejado, propio de los días de febrero, y en la mente de los paceños, entre ellos el fotógrafo Carlos Reyes Hernández, perdura el recuerdo de la visita a este puerto de la reina Isabel II de Inglaterra.
"Rompió con todos los protocolos", señaló Reyes Hernández, en una charla con los reporteros de Notimex.
Sentado en su estudio fotográfico en la avenida Jalisco, el fotógrafo de prensa, de 78 años de edad, no batalla para recordar cada detalle de esa visita.
Ese día, Carlos Reyes recibió la orden-petición del entonces gobernador Alberto Andrés Alvarado Arámburo: alistar su equipo para la vista de la reina de Inglaterra, que arribaría la mañana del 22 de febrero al muelle antiguo, en el malecón de La Paz.
La monarca desembarcó en el centro de la bahía y fue llevada en una lancha hasta el muellecito, remodelado a propósito de esa visita, para que los lugareños fueran testigos del inusual evento. Una reina, con toda su realeza, pisaba el suelo sudcaliforniano.
"Bajó acompañada del príncipe Felipe", comentó Carlos, rememorando, con cierta emoción en su voz, el trajinar de la realeza, cómo la reina Isabel II saludaba de mano al mandatario estatal y a cada uno de los que acudieron a darle la bienvenida.
Reyes Hernández, cámara en mano, registró a través del obturador cada uno de esos detalles. El momento era histórico, había que plasmar los detalles en papel, para que perduraran no sólo en la mente de los paceños, sino en los anales históricos de La Paz.
Un total de 22 de sus fotografías forman parte del Archivo Histórico de La Paz, que revelan, uno a uno, los momentos que la reina Isabel II convivió con los paceños; "los niños fueron sacados de las escuelas para que testificaran esta visita", evocó.
Las fotografías de Carlos Reyes detallan esa manifestación desbordada de los paceños, quienes acompañaron hasta la catedral a la soberana, quien, profesando el protestantismo, dejó a un lado el protocolo y llegó hasta el histórico y céntrico edificio.
Para Carlos Reyes, que en su carrera de fotógrafo y desde que llegó a La Paz en 1970, le ha tocado vivir muchos momentos históricos, ninguno comparado con este de la visita de una reina, cuyo recuerdo perdura en su mente y en sus fotos.
"Fue un día especial para todos nosotros", dijo con nostalgia, al recordar que los días previos fueron de mucha labor para los paceños. Se trabajó arduamente en la rehabilitación del pequeño muelle y en el histórico quiosco, emblema de La Paz.
Las calles de la ciudad, ese 22 de febrero lucieron en plenitud: pocas veces se tenía a una soberana pisando el suelo sudcaliforniano, había que darle el mejor recibimiento, que se fuera impactada de esta visita.
"Esperábamos que esa visita fuera el despegue de Baja California Sur, pero su despegue se demoró un poco más", evocó Reyes Hernández. No obstante, la visita de Isabel II representó un antes y un después de la capital sudcaliforniana.
"Se han dicho muchas leyendas en torno a su visita, pero la mayoría son eso: leyendas", dijo Carlos.
Lo que no es una leyenda, refirió el experimentado fotógrafo, es la impresión que se llevó la reina Isabel II cuando fue llevada a Laguna Ojo de Liebre, que ya había sido declarada como zona protegida, y pudo convivir con las ballenas.
"Un señor de apellido Fisher, le dijo a la reina todo lo referente a la ballena gris, entre otros tema su apareamiento, en el cual es necesaria la presencia de otra ballena para su auxilio. La reina se fue maravillada con lo referente a la ballena", dijo.
Luego de transcurridos 32 años de la visita de Isabel II, todas las tardes, especialmente los fines de semana, los habitantes de esta ciudad recorren el malecón en caminatas familiares; los que tienen más de 40 años aún recuerdan ese 22 de febrero de 1983.
A los más jóvenes, cada vez que se detienen en el pequeño muelle o se pasean por el quiosco, se les narra la historia y quienes tienen acceso al archivo histórico conocen las imágenes capturadas por la lente de Carlos Reyes, fotógrafo de prensa.
(Ilustración: foto de Carlos Reyes Hernández.)
* El Sudcaliforniano. Lunes 29
de junio de 2015.
ACTUALIDAD
CAMPAÑAS DE VACUNACIÓN

Ésta es una costumbre tan antigua en Baja
California Sur, que de ella existe noticia desde 1844, año en que el coronel L.
Maldonado se hizo cargo temporalmente de la jefatura política y de la
comandancia militar. Fue tan breve su administración (entre las de Mariano
Garfias y Francisco Palacios Miranda) que apenas la hallamos consignada en los Apuntes históricos de don Manuel
Clemente Rojo, y don Pablo L. Martínez la omite en su conocida obra.
El asunto es que, a principios de ese mismo
1844 se abatió sobre la población de La Paz una epidemia de viruela. El señor
Maldonado mandó traer vacuna de Mazatlán y él mismo se puso a aplicarla, junto
con el juez de primera instancia don Francisco Lebrija, a los vecinos que
acudieron voluntaria y gustosamente para recibirla, con el resultado de que al
poco tiempo éstos fueron atacados por la fatal enfermedad, y en vista de que
los demás se rehusaron a recibir la inoculación, el gobernante hizo que se los
llevaran a la fuerza, y así “los vacunaba y los despachaba para que fueran a
morir a los pocos días después de la operación; no hubo uno solo que
escapara...”
Los funcionarios ensartaban en una aguja
gruesa un poco de algodón humedecido en el pus, y enseguida, “como quien cose
un lienzo, pasaban esta aguja entre cuero y carne del vacunado; cortaban el
pabilo dejándole la mecha adentro y, a los pocos días, alma a la eternidad.”
El gobernador (1858) Ramón Navarro Castro,
informante del señor Rojo, añade que “cuando comenzó la operación de la vacuna
había en este puerto más de 600 almas, y después no quedaron arriba de 200.”
Verdadera mortandad en que no estuvo
incluido el señor Maldonado, hombre muy irascible, pues falleció al poco tiempo
de “un accidente provocado por la misma cólera y cayó al suelo quedando muerto
en el acto.”
De manera que, en virtud de tan fatal
experiencia, los servidores públicos harán bien en dejar toda labor relativa a
la salud en manos de los directos responsables de atenderla.
CRÓNICA HUÉSPED
MUERTE DEL PADRE
SALVATIERRA
Por Francisco Javier Clavijero*
“En marzo de este año de 1717 llegó a Loreto el padre
Nicolás Tamaral, destinado a la proyectada misión de Cadegomó, o sea de la Purísima Concepción.
Llevó al padre
Salvatierra una carta del padre provincial en la cual le decía que habiendo
llegado a México el nuevo virrey marqués de Valero, encargado de algunas
órdenes de la corona relativas a la California, y deseoso de ejecutarlas y de
favorecer aquellas misiones, quería su excelencia conferenciar antes largamente
con él y pedirle algunos informes, y que por tanto convenía que viniese a
México cuanto antes.
El padre Salvatierra, a pesar de su vejez y de sus graves
enfermedades, salió de Loreto acompañado del hermano Bravo el 31 del mismo mes,
dejando al padre [Juan de] Ugarte la superintendencia del presidio y de las
misiones. A los nueve días de navegación llegó a Matanchel, y de allí pasó a
caballo a Tepic.
Esta caminata le agravó de tal modo los dolores de la piedra
[cálculos en la vejiga], que no pudiendo continuar el viaje de otra suerte, fue
llevado en camilla por algunos indios hasta la ciudad de Guadalajara. Allí,
aumentándose sus males, tuvo que tolerar por más de dos meses un acerbo
martirio en vez del que siempre había deseado sufrir por la fe de Jesucristo; y
conociendo que iba a terminar su vida mortal, encomendó al hermano Bravo los
negocios que debían tratarse en México, le dio las instrucciones necesarias y
le ordenó que escribiese a los misioneros de la California diciéndoles: que él,
ayudado de los párvulos californios que estaban en el cielo, esperaba alcanzar
de la clemencia de la santísima Virgen que protegiese poderosamente aquel
naciente cristianismo; que pusiesen todas sus esperanzas en Dios, y que no
dudaba que se dejarían primero quitar la vida que abandonar aquellos sus hijos
en Cristo. Sobre todo, suplicó al hermano y por su medio a todos los de la
California que le perdonasen el mal ejemplo y todos los disgustos que les
hubiera dado.
El hermano lloraba amargamente, así como algunos californios que
habían venido en aquel viaje, cuyas extraordinarias demostraciones de dolor
eran tales que movían a compasión a los que las veían o las sabían. Luego de
que se supo en la ciudad el riesgo en que se hallaba un hombre venerado por
todos como santo, se hicieron en muchas
iglesias rogativas públicas por su salud; pero el Señor quería dar por fin a su
siervo fiel el descanso de tantos trabajos y el premio de tan relevantes
servicios, y así, habiendo recibido los santos sacramentos y preparándose con
los más fervorosos actos de todas las virtudes cristianas, exhaló
tranquilamente el espíritu el sábado 17 de julio de 1717, a los setenta años de
edad.
Asistieron a su entierro el presidente y oidores, el clero secular y
regular, toda la nobleza y un inmenso concurso de pueblo publicando todos a porfía
su santidad. Fue sepultado en la capilla de la Virgen de Loreto que él había
edificado en la iglesia de los jesuitas, y sus huesos fueron después colocados
en una caja separada, cerca del altar de la Virgen, cuya devoción había
promovido en todo el reino, en donde dura hasta hoy su memoria.”
RESEÑA
POLÍTICA SIN
ADJETIVOS

En el transcurso
de su lectura medio siglo después, fui, como siempre hago, subrayando los
conceptos que me resultaron sobresalientes para entender los criterios respecto
a lo que el propio maestro llama “la ciencia de las ciencias.” Permítaseme
aprovechar este breve espacio para compartir con ustedes esas acotaciones, tomadas
página a página y a veces sin enlace, a reserva de que cada quien, en caso de
interesarse, pueda adquirirlo y disfrutarlo completo, pues los traductores
Mercedes Zorrilla Díez y Miguel Ángel Fernández se esmeraron en verdad de
trasladar fielmente a nuestro idioma el texto de Crick, que para esta edición
prologó José Woldenberg, por entonces presidente del IFE, organismo que además
copatrocinó la publicación en lengua española en 2001.
De la política
dice que es “esencial para la auténtica libertad”, “La política son las
acciones públicas de los hombres libres”, La política surge de la aceptación de
limitaciones”, “un sistema político es un tipo de gobierno en el que la
política logra garantizar una estabilidad y un orden razonables”, “Y es una
actividad compleja; no se reduce a la aspiración de un ideal, ya que entonces
los ideales de los demás podrían verse amenazados”, “la política depende de un
orden establecido”, “el pensamiento ideológico es una negación explícita y
directa del pensamiento político.”
“El arte, por
ejemplo, no puede ser politizado y seguir siendo arte”, “Las semejanzas entre
los estilos de pensamiento nazi y comunista pueden verse también en su énfasis
común en la violencia”, “Y la política es un concepto que se mantiene al margen
de la admitida relatividad de las aspiraciones y doctrinas políticas concretas:
hasta tal punto es autónoma y creativa”, “el mayor peligro, tanto para el
individualismo como para la política, es creer en la existencia de la voluntad
general.”
En alguna parte
cita esta afirmación lapidaria de Oliver Cromwell: “Un hombre nunca llega tan
lejos como cuando no sabe adónde va.”
Expresa más
adelante que “la identidad de un individuo no depende por entero de la
conciencia social”, “El pensamiento político ha de diferenciarse claramente del
pensamiento ideológico”, “La política no puede proporcionarnos una ideología;
la ideología significa la destrucción de la política”, “la política debe ser
defendida “incluso de la democracia”, “la primera función de un gobierno es
gobernar, y eso... puede suponer asumir conscientemente el riesgo de la
impopularidad”, y transcribe esta rotunda aseveración de McCarthy: “El político
que no es capaz de soportar la impopularidad no es digno de ocupar el cargo.”
Habría que analizar bien esto en referencia a lo que está ocurriendo en México.
Crick sostiene
también que “Antes de aspirar a la democracia... hay que aspirar a la
política”, “Un gobierno fuerte necesita una oposición fuerte para ser libre y
eficaz”, “La democracia es un componente de la política”, “El racismo es un
mito sobre el cuerpo cuya expresión es seudocientífica”, “El racismo... es la
teoría que concede a una nación el derecho de oprimir a otras”, “el
nacionalismo no es un prerrequisito para la unidad nacional.”
Advierte que
“Una política de venganza no es política”, “el poder político implica una
limitación de poder”, “Los que hablan de los beneficios de la ciencia en
realidad suelen referirse a la tecnología, y muchos parecen creer que la
administración pública debería llevar una existencia separada de la política
porque se trata de una actividad puramente técnica”, “La clase que consigue
incrementar la producción gana poder”, “El Estado es el protector de los
derechos o el árbitro entre intereses divergentes”, “los seres humanos son
criaturas siempre movidas por el descontento además de por la curiosidad”,
“escuchan con avidez a cualquier predicador de verdades únicas.”
Sostiene que
“Son tantos los problemas cuya única
solución es política, que es necesario defender al político del orgullo del
ingeniero o de la arrogancia del técnico”, “Cualquier principio inamovible es
antipolítico”, “Gobernar bien significa gobernar con la mente puesta en los
intereses de los gobernados, y el único método seguro de averiguar cuáles son
esos intereses es dándoles representación en un cuerpo políticamente soberano”,
“Para que un gobierno sea fuerte, la política ha de extenderse hasta involucrar
a la misma base de la sociedad”, “Si el gobierno ha de gobernar, no hay excusa
para que gobierne mal”, “La revolución es, sin duda, la destrucción de la
política, no una forma de política acelerada”, “El doctrinario en el poder...,
poco importa lo que escriba o diga en su pretencioso lenguaje, porque lo que
interesa ver es qué hace en la práctica”, “la política es un diálogo con la
tradición” “lo que mantiene unido un Estado libre no es la voluntad general ni
el interés común sino la misma política”, “Los Estados sólo sobreviven mediante
la continua adaptación a circunstancias cambiantes”, “el individualismo no es
una doctrina política”, “de la simple y magnífica realidad de la identidad
individual no se deriva ningún estilo de gobierno concreto”, “La sociedad no es
un grupo como los grupos que la integran, y si en ella hay conexión entre las
partes, esa conexión es producto de la política”, “nada puede estar
completamente al margen de la política”, “La política es una manera de gobernar
comunidades plurales sin violencia innecesaria”, “la conciliación es, como
mínimo, preferible a la coerción”, “el gobierno pacífico es intrínsecamente
mejor que el gobierno violento”, “La política, lejos de ser un mal necesario,
es un bien práctico”, “La política es, por así decirlo, una interacción entre
la dependencia mutua del conjunto y cierta independencia de las partes”, “La
burocracia, como las órdenes religiosas de la cristiandad medieval, puede
erigirse en algo más que un intermediario entre los científicos, los gerentes y
los trabajadores por una parte, y el poder por otra; puede constituir por sí
misma una fuerza conservadora que actúe en nombre de quien sea que esté en el
poder en el momento en que empiecen a producirse esos grandes cambios” que se
proponen.
Algo muy
importante, ya casi para terminar de transcribir: “No existen garantías en
política”, “puesto que la función de la política es la conciliación de
intereses divergentes, no sólo debe haber justicia sino que debe ser evidente
que la hay”, “las organizaciones que participan en la política recuerden que su
voluntad no es la única voluntad”, “Ningún Estado tiene la capacidad para hacer
a los hombres felices, aunque todos tienen la capacidad para hacerlos
desgraciados.” Atención: “cuando las personas en general apáticas de repente
muestran un vivo interés en la política suele ser señal de peligro”, “El
político siempre debe pedir tiempo. El hipócrita y el enemigo de las reformas
utiliza el tiempo como excusa para el inmovilismo”, “El político no guarda
memoria de los insultos y cuando está en el poder no se toma la oposición como
asunto personal”, por lo menos, aconseja, “no debe mostrar su orgullo herido.
Sin embargo, admite, la tentación es grande”, “Si un político siente orgullo ha
de ser, como especificó Aristóteles, de su habilidad para la conciliación.”
Como siempre
digo: al final la política nos salvará.
CRÓNICA
EL SAN MIGUEL

Y sí: de
inmediato advertimos que el barco adquiría una velocidad mayor a la de los
otros de cabotaje que mirábamos transitar por la ensenada de La Paz. Sin
embargo, al poco tiempo y cuando pasábamos por el canal de San Lorenzo (en el
estrecho que forman la isla Espíritu Santo y la playa El Tecolote, en tierra
firme), el barco se detuvo. Inquirimos por la causa y alguno de los marineros
nos dijo que uno de los motores se había descompuesto; acto seguido el capitán
dio la orden de regresar.
Sin duda la
reparación exigía más días de los que podíamos esperar, y se nos informó que al
día siguiente haríamos el viaje en el Blanco,
otro de los barquichuelos de alguna de las empresas navieras locales. Con mucha
mayor lentitud pero llegamos finalmente a nuestro destino, lo que significó
nuestra primera ausencia del paraíso.
Poco más de seis
años después nos enteramos de que el San
Miguel había naufragado durante un temporal que debió enfrentar de retorno
de Topolobampo, después de haber sufrido la avería de uno de sus dos motores, a
más de cien kilómetros de la isla de Cerralvo.
Un relato de los
hechos es el de Francisco Amador García-Cólotl, de cuya parte medular, copiamos:*
“La tarde llegó con nubes y el viento arreció desde las
siete. La oscura noche, cual hoyo negro, inundó la mar embravecida antes de las
nueve. El San Miguel se aproximaba a la costa de la península. Acompañaban al
capitán [Juan García], entre otros, Martín Cadena, amigo y leal compañero y
Ángel Petit. La tripulación era conformada por catorce en total. Las olas
de la boca del golfo de California crecieron enormemente esa noche y madrugada;
entre las olas se formaban surcos de grandes paredes de agua iluminada por
rayos y sonidos ensordecedores de los truenos. Los canales que se formaban
entre ola y ola hacían mecer al San Miguel, a su tripulación y a su carga,
novecientos tambos de gas avión para La Paz, cuando bajaba por las paredes de
agua y la proa apuñalaba la furiosa superficie entre vientos que silbaban
maldiciones y aullaban por los recovecos del barco. El San Miguel reportó la
avería de uno de sus dos motores a la Capitanía de Puerto de La Paz en la
madrugada. El capitán pidió a los de capitanía, entre ellos su hermano Francisco
García alias el Bronco, que prepararan café por si llegaban al muelle fiscal a
la siguiente mañana. Con un solo motor, intentaban llegar al canal que forman
la isla Cerralvo y la bahía de La Ventana. De ahí, a la bahía de La Paz y
atracar en el muelle fiscal sería un viaje más sencillo. El capitán se reportó
nuevamente a capitanía mencionando que las olas subían y bajaban el barco con
movimientos violentos y que la fuerza del único motor no hacía mella a la furia
del mar embravecido. El último reporte del San Miguel registró su posición a
sesenta millas náuticas de la isla Cerralvo; ciento cuatro kilómetros lo
separaban de la seguridad de la hermosa bahía y la isla. ¿Qué fue del San
Miguel? Nadie lo sabe...”
Nadie aún lo sabe.
* En http://sudcalifornios.com/item/el-barco/
ACTUALIDAD
SERVILLETARIO*
Gabriel García Márquez escribió sus
conocidos 12 cuentos peregrinos en
sendas servilletas que tenía a mano cuando le llegaba la idea de un texto en
cualquier café o casa donde se hallara. Lo dijo en la parte introductoria de la
primera edición.
Los dueños de restaurantes ya saben que los
peores depredadores de servilletas son los niños, los escritores y los
dibujantes, aparte de los griposos que muestran su consideración por los demás,
usando servilletas a costillas de la empresa.
Jesús Flores ni siquiera espera a que le
llegue la luz del tema para empezar a hacer trazos en la pieza de papel de los
comensales a su alcance, en tanto escucha las cosas que se expresan en la
reunión. Buena manera de beneficiar el tiempo mientras se expresan cosas inteligentes o se dicen boberías,
podemos añadir.
Pero él mismo cuenta que esta grafomanía le
viene desde sus tiempos estudiantiles; eso lo dirá mejor el autor de este Servilletario, que es resultado estético
de un impulso vital y tal vez imprescindible, que para el movimiento artístico
sudcaliforniano constituye una revelación afortunada.
Pero eso lo dirán mejor ustedes con cuya
generosa presencia inauguran la presente exposición que como cronista de La Paz
me ha producido gran gusto promover con la complicidad del licenciado Flores
Romero, la Alianza Francesa y este Centro Cultural Roger de Conynck, incluido
todo su numeroso staff que integran
Rubén Sandoval y Bonifacio Hernández.
Que ustedes la disfruten.
* En la apertura de la
exposición, el 25 de junio de 2015 en la Alianza Francesa de La Paz, BCS.
CRÓNICA HUÉSPED
SILUETAS REGIONALES
Por José Rogelio Olachea Arriola.*

Una tarde de
cada día, incluso los sábados y domingos, encaminábamos un perímetro romántico
del jardín, atrás del viejo palacio de gobierno, para charlar con las chicas de
la secundaria Morelos, e ir enseguida
a la nevería de doña Ever de Román (Independencia y B. Domínguez) y bajar al
cine Juárez a ver una película de
Luis Aguilar, Jorge Negrete y Pedro Infante, con las estrellas María Félix y
Dolores del Río, y al salir de la sala todos asistíamos al malecón a ver el
crepúsculo...
Cuántos
establecimientos comerciales recordamos,como la panadería El Paso, de doña Felícitas Sánchez, en la calle Ezquerro; Luciano
Geraldo, en la avenida Revolución y Allende.
La tienda de
Rafael de la Peña, en 16 de Septiembre y Revolución, con su típica bomba de
gasolina tubular. Allí adquiríamos mercancía y saludábamos a tantos
dependientes: el Toño Flores Mendoza, la Chayola Salgado, Rogelio Salgado de la
Peña, D. Loretito T., Ramón Pedrín...
En la Serdán y
16 de Septiembre la tiendita de don Salomón Díaz, en donde daban el pilón
clásico; La Voz del Pueblo, de don
José Romero, en Degollado y Serdán, en la cuadra del cuartel Pineda, en donde
observábamos el cambio de guardia del 5o. Batallón de línea. Nos mandaban a
comprar leche fresca en el comercio de don Esteban Talamantes, en Altamirano
101, en donde llegaba el pan caliente de la tahona.
En aquellos días
operaba la línea aérea Aerovías Contreras,
con aviones Douglas DC-3, para 24 y 21 pasajeros; su agente era don Guillermo
Escudero.
Allá en avenida
Bravo operaba la tienda mixta de don Salomón Castro. No olvidamos La Palma, de don Isidoro Scholnick; La Ciudad de Viena, de don Salomón
Tuchmann, en Zaragoza y Artesanos. El
Ancla, de J. Rosario Castro; don Francisco Loubet vendía gas L. P., en
hotel Palma en Ezquerro.
Dentro del
apacible ambiente, cuando caminábamos por la 16 rumbo a la playa, saludábamos a
don Manuel Wong conversando con don Agustín Arriola, ganadero que fuera gobernador
civil del Territorio de 1920 a 1924. Tenía sus oficinas por el rumbo, y su casa
en avenida Ezquerro.
También operaba
la ruta de Aeronaves, con su agente
Emilio Alcedo Arantxasti. Don Miguel L. Cornejo era comerciante en productos
del rancho Las Aripas, con oficinas
en A. Obregón 73, sur. Don Luis Unzón Cordero tenía la tienda La Triunfeña en B. Domínguez No. 29,
mientras don Goyo Chávez M. vendía en Guillermo Prieto y 16 de Septiembre, los
mejores licores. Don Antonio Cota Carrillo adquiría pieles de res para una
tenería, en Ignacio Ramírez. La Agencia
Von Borstel y Castro operaba los buques motores Araguán, Edna Rosa, Arturo y Blanco, en Lerdo y Álvaro Obregón. El hotel Los Arcos se iniciaba con su gerente Sabino Pereda.
Rafael Leana
Rojas operaba el cine California, en
Revolución 68, en donde hoy está La Sirena.
* En revista Sudcalifornidad,
dirección de Mercedes Acuña Peralta, núm. 11, agosto de 1991, pág. 16.
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