EL NOMBRE DE LA PAZ
Este 3 de octubre se cumplen 416 años de la fecha en
que Sebastián Vizcaíno dio el nombre actual a la que es, desde el primer tercio
del siglo XIX, la capital de Baja California Sur.
Según la crónica
del viaje, fue tal día de 1596 cuando el navegante español, a la salida de este
puerto para continuar la expedición por el litoral del golfo, expresó que
dejaba el lugar “que llamamos de La Paz”, con lo cual eliminó definitivamente
la denominación que le había impuesto Hernán Cortés hacía poco más de sesenta
años.
Escasamente se
pudiera justificar la osadía de Vizcaíno al pasar por encima de la designación
cortesiana: para hacer el viaje a California (el primero de dos) tuvo que haber
consultado la documentación que existía sobre la presencia del conquistador de
México-Tenochtitlan en esta tierra; en ella se encontraba el Auto de posesión del puerto y bahía de Santa
Cruz, del 3 de mayo de 1535.
Por otro lado,
reconoció que el sitio era el mismo de la colonia que estableció don Hernando
en esa fecha, por lo que resultaba imaginable que hubiera recibido un nombre en
aquella ocasión.
El de California, por otra parte, se aplicaba
a toda la provincia, considerada un conjunto de islas, la mayor de las cuales
era Santa Cruz.
Cortés murió en
1547, de manera que poco podía inconformarse por el atrevimiento.
Así, la
efeméride viene a sumarse a las conmemoraciones del mes de la Sudcalifornidad,
como el congreso sudcaliforniano determinó que se diese la designación a
octubre de cada año, pues en él ha ocurrido buena cantidad de acontecimientos
relevantes en la historia de esta mitad peninsular.
Dentro de los
más importantes está el de la triunfante defensa de la soberanía nacional en Mulegé
contra la intervención norteamericana, el 2 de octubre de 1847; el que
recordaremos este día 3, motivo del presente artículo; y el de la fundación de
Loreto el 25 de octubre de 1697.