El propósito fundamental de este volumen de fácil, amena y, por tanto, sugerible lectura, se advierte con claridad en el preámbulo:
“...cuando la violencia y el poder de la espada de los conquistadores habían fracasado ya en sus afanes y empeños de doblegar las Californias, interviene providencialmente nuestra entidad [Querétaro, a la que el autor concede la calidad de Conquistadora y Madre Espiritual de las mismas] y, con su generosidad, propicia su dominación espiritual, hecho realizado a través, primero, de la ayuda brindada al padre Juan María de Salvatierra por un queretano desprendido y generoso1 y, después, por medio de las experiencias y enseñanzas que la Sierra Gorda queretana brindara al fray Junípero Serra durante su permanencia en ella y que de mucho le sirvieron posteriormente en sus seráficos afanes para la evangelización de la Alta o Nueva California.”
El estudio abarca desde la aparición del nombre de California en Las sergas de Esplandián, pasando por los descubrimientos, empeños y fracasos para la integración de California a los territorios españoles conquistados, hasta la presencia de Junípero Serra en la península en preparación a la expedición en busca de lo que sería llamada Nueva o Alta California.
1 Se refiere a Juan Caballero y Ocio (1644-1707), sacerdote comisario del Santo Oficio, natural de Santiago de Querétaro, cuyo desprendimiento le mereció el título de Adelantado de las Californias. Dichas donaciones dieron origen al útil y finalmente controvertido Fondo Piadoso de las Californias.