Por José Luis Galiano García-Galiano Robles,
corresponsal del Seminario de Cultura Mexicana
en León, Guanajuato.
“En 1977
estuve en La Paz dos meses en un intento de mi padre por irse a vivir ahí con
nosotros. Mi fascinación por el
transbordador, el Mogote, Balandra, la voz de “las playas del mar Bermejo” en
la radio, el Gavilán de La Purísima y
su vino clandestino, las almejitas, los higos, el sol bajando en el malecón, las
empanadas de piña que vendían en charolas, el huracán, los niños que se
descalzaban en la escuela primaria..., recuerdos de mis 12 años.”