XXXVII ANIVERSARIO CONSTITUCIONALHubo de todo en la sesión con que se quiso celebrar el aniversario 37 de haber sido promulgada la Constitución sudcaliforniana, el domingo 15 de este enero, desde informalidades protocolarias e incongruencia retórica hasta proposiciones interesantes.
La invitación a la ceremonia fue hecha por el titular del poder Ejecutivo estatal (aunque se llevó a cabo en la sede del Congreso). Sin embargo, los únicos que estuvieron presentes presidiendo fueron los titulares de los poderes Legislativo y Judicial; es decir que a la fiesta asistieron todos los invitados menos el anfitrión.
Se vio iniciado el acto (supuestamente solemne) por un conductor de absoluta informalidad por fuera pero también interiormente, capaz del atrevimiento de adelantarse a las órdenes de reglamento de la banda de guerra y clausurar el programa sin anunciar el retiro de la Bandera Nacional.
El discurso atropelladamente leído por la parte oficial fue insustancial e incoherente, confuso y lleno de lugares comunes e ideas previsibles; nada en que reflexionar excepto en la aseveración de que en Baja California Sur “los días complejos en materia económica y jurídica nos urgen a una nueva reingeniería [sic] institucional, de ahí la importancia de aplicar políticas públicas que permitan respuesta directa y eficiente de las instituciones a los ciudadanos para lograr la Sudcalifornia que aspiramos [a lograr] para nuestros hijos con progreso y en armonía”, pues precisamente la oradora sabe, por la índole de su función pública, que los ciudadanos de esta entidad continúan en espera de respuesta directa y eficiente sobre cuentas y hechos de los dos sexenios anteriores que están pendientes de aclarar.
Seguramente lo único que justificó la conmemoración fue el texto de José Luis Vázquez Ceja mediante el cual hizo planteamientos realmente importantes. Dijo, por ejemplo, que, después de buscar infructuosamente un ejemplar de la Constitución de Baja California Sur en las librerías paceñas, proponía “que la dependencia responsable decida preparar una edición con explicaciones sencillas de cada uno de sus artículos, con una breve introducción histórica y un amplio glosario […] de fácil lectura para cualquier ciudadano.”
En otro párrafo lanzó, contundente, una proposición que sorprendió a muchos y a otros les pasó de noche: la “necesidad de trabajar, gobierno y pueblo de Sudcalifornia, en aras de recibir el 2015 con una nueva Constitución.” Nada menos…
Y enseguida hizo algunos apuntamientos acerca de los que, según su criterio, habrían de ser los componentes esenciales del nuevo código tales como derechos humanos, objetivos del desarrollo del milenio (ONU), medio ambiente y, fundamentales desde nuestra óptica, compromisos ciertos con la educación, la ciencia y la tecnología.
Momento especial de la intervención fue la referencia del disertante a “la aberrante ilegalidad que persiste en la UABCS desde que fue violada su autonomía por los poderes Legislativo y Ejecutivo pasados.”
Y presentes, podría añadirse.
En fin, que, por lo demás, el aniversario significó otra fecha del calendario cívico regional que pasó con pena y escasa gloria. Evidencia clara de que hay en todo ello ausencia de vocación, convicción y voluntad políticas.