CRÓNICA HUÉSPED

PRIMERA NAVIDAD EN CALIFORNIA

Por Juan María de Salvatierra*

La víspera de la Natividad [de 1697] bendijo el padre Francisco María Píccolo la nueva cruz e iglesia de árbol blanco, semejante a un árbol llamado sangre de drago, muy frondoso y alegre, de que hay grande abundancia en este valle [de Loreto]; y hemos podido hacer con estos árboles todas nuestras fábricas dentro de la fortificación.

Se estrenó la nueva iglesia con seis misas de Natividad [tres por cada uno de los misioneros], con tanta alegría de todos los pobres pobladores, que todos confesamos no haber tenido mejores ni más alegres fiestas en dichas partes [...]

Y de esta manera pasamos las fiestas de Pascua de Navidad con mucho gozo y alegría, como dije arriba.

Por año nuevo se despachó la lancha a la Nueva España, a Yaqui, para que nos trajese algún socorrito y juntamente dar la nueva de cómo vivíamos y si había llegado a Yaqui alguno de los compañeros españoles movidos de Dios y de María Santísima a esta empresa, por ser tan pocos los conquistadores [...]”

* En Misión de la Baja California, por Constantino Bayle, La Editorial Católica, 1941, Madrid, págs. 63 y 67.

(Imagen: dibujo de J. Muñoz López en Noticia de la California y de su conquista espiritual, por Miguel Venegas, Edit. Layac, 3 tomos, México, 1943, t. II.)