ACTUALIDAD


MANDO ÚNICO ESTATAL DE LA POLICÍA

Mediante la iniciativa al Congreso de la Unión para lograr el llamado Mando Único Policial, el presidente de la República propone que en cada entidad federativa el gobernador tenga bajo su autoridad directa la fuerza policiaca.
Ello “busca poner orden en la competencia y mandos de policías locales –se resume en la página web de la Presidencia de la República-, a fin de establecer mayor coordinación y una sistematización homologada, tanto del reclutamiento, la selección y el establecimiento de controles de confianza.”
Al respecto es necesario recordar que, desde 1975, la Constitución Política del Estado de Baja California Sur estableció en el artículo 79, dentro de las facultades y obligaciones del gobernador (fracción XII): “Tener bajo su mando la fuerza pública en los municipios donde resida habitual o transitoriamente” y (fracción XXIX) “Nombrar y remover libremente el personal de policía del municipio donde resida.”
Es decir que el constituyente sudcaliforniano previó la conveniencia de que el titular del ejecutivo estatal tuviese bajo su jurisdicción a la corporación policiaca local y poder designar al personal de ésta, por lo menos en el ámbito municipal donde residiere eventual o permanentemente.
Entre las facultades y obligaciones del presidente municipal (art. 151) estaban “Nombrar y remover a los delegados, subdelegados, alcaides y personal administrativo...” (fracción VI).
Poco después, en el número 31 del Boletín oficial del gobierno del estado, mediante el decreto 21 de fecha 26 de agosto del mismo 1975 (que fue la primera reforma a la Constitución), fue derogada aquella fracción del artículo 79 y se adicionó la mencionada del artículo 151, para quedar así esta última: “Nombrar y remover a los delegados, subdelegados, alcaides y personal de policía y administrativo...”, con lo cual se dejó al gobernador sin esa facultad, como lo había querido el Constituyente con clara visión de lo útil que resultaba que el mandatario tuviese la citada competencia en materia policial.
Tal y como se busca ahora que ocurra en toda la nación.
O sea que treinta y cinco años más tarde, tras experiencias amargas derivadas del control de la autoridad municipal sobre la policía, que ha prohijado, como se sabe, prácticas de corrupción, indisciplina y anarquía (por decir lo mínimo), el ejecutivo federal vuelve sobre la pertinencia estratégica de que el gobernador de cada estado posea el mando único de la policía.
Fue ésta otra primicia del Constituyente de Baja California Sur, de igual modo que la incorporación de diputados de partido (posteriormente de representación proporcional), la igualdad jurídica de la mujer (luego equidad de género) y la obligatoriedad de la educación media, entre otras disposiciones valiosas y trascendentemente vanguardistas en la rica historia del constitucionalismo mexicano.

em_coronado@yahoo.com

A propósito: Me permito informar a los conductores de programas oficiales que, de acuerdo con el artículo 67 de la Carta estatal, el nombre del titular del ejecutivo es “Gobernador del Estado de Baja California Sur”, sin el adjetivo “constitucional” que innecesariamente insisten algunos en adjudicarle.

HISTORIA


EFEMÉRIDES

OCTUBRE
“MES DE LA SUDCALIFORNIDAD”

24 (1869). Fue fundada la Masonería en Baja California Sur.

25 (1697). El jesuita Juan María de Salvatierra fundó la misión de Nuestra Señora de Loreto, en la zona guaycura denominada Conchó. Al mismo tiempo, dicho lugar adquirió el carácter de primera capital de las Californias.

27 (1932). Nació Marcelo Rubio Ruiz, quien sería prestigioso catedrático, maestro de varias generaciones de profesores, funcionario público y senador de la República por BCS. Murió en La Paz el 6 de enero de 1977.

27 (1976). Fue publicado el decreto que creó a la escuela Normal Superior del Estado de Baja California Sur, promovido por dirigentes y maestros de la sección tercera del SNTE y promulgado por el poder ejecutivo a cargo del Lic. Ángel César Mendoza Arámburo.
La ley respectiva se publicó en el número extraordinario del Boletín Oficial del gobierno estatal, a sólo un año y medio del inicio de esa administración y luego de una larga serie de gestiones, algunas de ellas desalentadoras, ante el gobierno federal.
Fue finalmente el carácter batallador de los maestros Enrique Estrada Lucero, Francisco Jerez Angulo, Humberto Mayoral Meza, Manuel Salgado Calderón, directivo sindical, José Salgado Pedrín y Julio César Saucedo Pineda, así como el empeño del gobernante, quienes hicieron cristalizar los anhelos del magisterio sudcaliforniano por tener su propia institución formadora de docentes para la educación media.

LIBRERÍA


Ensayo político sobre el reino de la Nueva España, por Alejandro de Humboldt, Edit. Porrúa (Col. “Sepan cuantos..., 39), México, 1973.

El berlinés Alejandro de Humboldt (1769-1859) pertenece a la generación ilustrada del siglo XVIII, influido por el izquierdismo, extremadamente racionalista y liberal, demócrata, fisiócrata y anticlerical.
Llegó a la capital novohispana en abril de 1803, después de haber recorrido Cuba y parte de América del Sur en su largo viaje de investigación científica en el Nuevo Mundo. En México estableció estrechas relaciones con los círculos intelectuales y políticos de la colonia, donde permaneció durante once meses y medio y comenzó a tomar forma su Ensayo, que tanta trascendencia tendría a partir de la primera publicación de 1811 en París. Fue, según se ha expresado, “como el acta de nacimiento de la nueva nación y surgió del encuentro venturoso de Humboldt y México.”
A la provincia de la Vieja California (o Antigua, es decir la península) hace referencia el autor en el capítulo VIII, libro tercero de la obra que comentamos.
Ahí, en el apartado XIV, da la noticia de que es habitada por 9,000 individuos (en 1803), con superficie de 7,295 leguas cuadradas.
Sobre el tema de la población dice, luego de proporcionar algunos datos históricos: “Los naturales de la península que viven fuera del territorio de las misiones son, quizá de todos los salvajes, los que están más cerca del estado que se llama de naturaleza. Se pasan los días enteros tendidos boca abajo en la arena, disfrutando del calor que le ha comunicado la reverberación de los rayos del Sol.”
Añade que, de acuerdo a los informes que le fueron aportados por religiosos residentes en ambas Californias, el número de habitantes de la del sur se había reducido en los últimos treinta años, al grado de que en los 16 pueblos existentes quedaban apenas de cuatro a cinco mil indígenas. Dicha mengua demográfica se acusó especialmente a la viruela y a otra enfermedad, probablemente sífilis, acarreadas por los europeos.
Como el investigador alemán nunca estuvo en California, es presumible que, efectivamente, muchos de los informes le fueron comunicados por religiosos franciscanos o dominicos, pero con seguridad acudió asimismo a la Noticia de la California del jesuita Miguel Venegas.