ACTUALIDAD


PRESENCIA INCONGRUENTE Y DISCURSO INEXTRICABLE

El jueves 27 de este mayo se efectuó en la sala de sesiones del congreso local la ceremonia en que fueron inscritos, en uno de los muros, el nombre del doctor Francisco Cardoza Carballo y la leyenda “Luchadores del FUS”.
Fue el acto que cumplió el acuerdo de la propia legislatura que se propuso honrar tanto los empeños profesionales y políticos del eminente médico sudcaliforniano, como los de quienes buscaron y obtuvieron finalmente, entre otras demandas sustanciales, que el gobierno de Baja California Sur estuviese en manos de un nativo de esta entidad.
Fue fácil advertir que en el espíritu de la celebración se hallaban igualmente los objetivos cívicos y repercusión política de “Loreto 70”. Se trataba, suponíamos, de un festejo de la Sudcalifornidad.
Por ello resultó para todos desagradablemente sorpresivo y de la mayor incongruencia que en representación del gobernador presidiera el programa su secretario general de gobierno, cuya nacionalidad ha sido públicamente cuestionada sin que haya sido satisfecha todavía la inquietud general en tal sentido, toda vez que es indudable el interés oficial de promover la imagen de dicho funcionario a la candidatura de su partido en busca de ocupar la titularidad del poder ejecutivo estatal.
Incongruente porque el empleado en alusión, con todo lo que se dijere a su favor, es ajeno a esta tierra y carece de mérito alguno, por tanto, para merecer el privilegio de encabezar el ceremonial que tenía el propósito de encomiar la obra de un sudcaliforniano de verdad y enaltecer los esfuerzos de inobjetables defensores de la dignidad regional.
Es evidente que la comisión llevó un mensaje que corresponde a cada quien descifrar.
Por otra parte, como si para disgustos hubiese sido insuficiente, el diputado encargado de pronunciar el discurso alusivo dio pésima lectura a un texto mal estructurado, vacío de contenido pero pletórico de dislates, que devino deshilvanado intento de recuento histórico. Si tenía la responsabilidad de explicar el motivo de la reunión, la dejó incumplida.
Menos mal que varios de los que ahí estuvieron tenían alguna información sobre el asunto. El resto quedó sin entender, como es el caso de un grupo de estudiantes secundarianos que regresaron a su escuela sin haberse explicado la significación del suceso al que asistieron.
Es deplorable que aún se ignore que la tribuna parlamentaria puede llegar a ser cátedra donde se dicten lecciones de sabiduría, orientación y rumbo a la sociedad, desde hace tanto tiempo ayuna de ejemplos superiores, mucho más allá del ejercicio rústico de la autoridad al que no hemos querido acostumbrarnos, como se negaron a resignarse nuestros viejos luchadores.

em_coronado@yahoo.com

HISTORIA


EFEMÉRIDES SUDCALIFORNIANAS

JUNIO

1 (1974). Representaciones políticas sudcalifornianas, encabezadas por el gobernador Félix Agramont, entregaron en Cabo San Lucas al presidente Luis Echeverría –quien asistió a ese puerto con motivo de la celebración del día de la Marina- un pergamino en que le solicitaron promover la reforma al artículo 43 y demás relativos de la Constitución General de la República para erigir en estado de la federación mexicana al territorio de Baja California Sur. El mandatario respondió afirmativamente en el propio acto a través del secretario de la Presidencia, Hugo Cervantes del Río, anterior gobernante de la entidad. La petición fue elevada a iniciativa de ley que el ejecutivo federal anunció en su cuarto informe de gobierno y envió al Congreso de la Unión el 2 de septiembre del mismo año.

2 (1875). Estalló en La Paz un movimiento armado que encabezaron Emiliano Ibarra y Eduardo Rivas, quienes secuestraron al jefe político, general Bibiano Dávalos, cuya liberación le costó tres mil pesos. Fuerzas federales provenientes de Sinaloa llegaron a sofocar la rebelión, lo cual ocurrió el día 25 siguiente.

LIBRERÍA


La Literatura en Baja California Sur, por Armando Trasviña Taylor, 134 págs., La Paz (BCS), 1971.

La primera parte de esta obra precursora de los estudios histórico-crítico-biográficos de la producción literaria en Baja California Sur, aborda la estructura social de BCS, el siglo XIX hasta la Revolución de 1910, el florecimiento literario a partir de entonces, y se ocupa de modo particular de los autores representativos de la época: Adrián Valadés, Filemón C. Piñeda, Margarito Sández, Fortunato Moreno, Cuauhtémoc Guerrero, Leopoldo Ramos, Fernando Jordán, Eduardo Bátiz, Rosario García, Francisco Cota Moreno y Miguel Liera Ibarra.
La segunda parte habla de la literatura actual y de algunas de sus figuras sobresalientes: Manuel Torre Iglesias, Pablo L. Martínez, Irene Mora de Galván, Jorge S, Carrillo, Jesús Castro Agúndez, José María Garma González, Abel Camacho Guerrero, Guillermo Arrambídez Arellano, Francisco Javier Carballo Lucero, José Alberto Peláez Trasviña, Néstor Agúndez Martínez, Esthela Galván de Moreno, Valente de J. Salgado Calderón, Rogelio Olachea Arriola, Jesús López Gastélum, Heliodoro López Almada, Francisco Arámburo Salas, Fernando Escopinichi, Carlos Domínguez Tapia y algunos otros más.
Todo lo cual fue objeto de una serie de lecturas en el auditorio de la Casa de la Juventud, de La Paz, previas a la edición (de autor) de la obra, a cargo de Magdalena Guzmán, Margarita Cortés, Jesús Murillo y este cronista. También hay que decirlo...